Etiquetas

Neil (108) Señor T (60) WeekendWars (37)

lunes, 15 de junio de 2009

Síntesis.

Y cuando todo llega a su fin, mirás atrás y crees que no ha sido tan largo.
Atrás quedan aquellas noches de frustración.
Aquellos días de enajenación.
O aquellas tardes de desesperación.

Pero sí, todo acaba. Sea bueno o malo. Todo tiene su fecha de caducidad.
Cada vez, me importa menos que el tiempo pase. He aprendido que como todo, seguirá su curso y que tú, no puedes hacer nada que no sea formar parte de él.
El tiempo es un privilegio que sabes que va a terminar. Disfrútalo. Aprovéchate de cada uno de sus segundos. Amenaza de muerte a los minutos si aceleran el ritmo. Y sobre todo, no lo malgastes. Vívelo.

Ha sido un largo año. Pero he aprendido mucho. He aprendido que por muchos agregados al messenya que tengas, sólo tres serán los que te arranquen una carcajada en cualquier momento. Que sólo con esos tres te sentirás realmente realizado, como la raqueta con pelota o la playa con mar.
Además me he dado cuenta de que no todo se basa en conseguir lo que te propones. Lo importante realmente es el camino que sigues para conseguirlo. Un camino que probablemente nunca sea fácil de recorrer, pero que a base de caídas, tu cuerpo mute una piel cada vez más inmune al impacto contra el suelo. Insistir en no parar. Y mirar siempre al horizonte con la cabeza bien alta.
Podrá que al final del camino, nada salga como has pretendido. Pero ¿y qué?. No será el último que pisarás. Y quién sabe, a lo mejor, a base de caminos pedregosos seas capaz de encontrar la desviación a la autopista, donde todo será más fácil, si estás preparado.

Y en síntesis esto se plantea con la siguiente ecuación:
caer + caer + caer + caer + caer + caer + caer + caer +caer + caer + caer = éxito.

Suerte.

Neil.

PD: Post número 13. Ideal para arengaros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario